Hace un tiempo, durante nuestro gran viaje por Asia, conocimos a una pareja en Mandalay. Sus nombres: Marta y Gerard. Meses mas tarde nos contaron su experiencia en una islita casi perdida en las costas de Camboya, Koh Rong. Nos hablaron tan bien de ella que, en cuanto tuvimos la oportunidad, fuimos a conocerla. Y nos enamoramos al instante… fue amor a primera vista, fue nuestro país de nunca jamás.
Han pasado menos de tres años desde entonces y ahora volvemos con los padres de Lety, queremos compartir nuestro rincón escondido con las personas más queridas. Pues al parecer este rincón no era solo nuestro y no solo nosotros lo hemos compartido. En este espacio de tiempo las cosas han cambiado por aquí. Si es que se veía venir…
En nuestra primera visita llegamos a la isla en un barco lento de narices, que parecía que se rompía a cada embestida de una ola y en el que eché la pota por la borda. Solo había uno al día, para que más? Si iba medio vacío! Hoy en día puedes elegir entre el barco lento, el barco rápido e incluso el catamarán privado! Y obviamente no solo hay uno al día, sino que puedes salir a diferentes horas. Y ojo, date prisa en no llegar muy tarde pues los barcos van hasta la bandera! Quién se habrá ido de la lengua? Ups!
Es el dilema de siempre, este tipo de lugares corren el peligro de convertirse en atracciones para el turismo en masa. Y nosotros hemos colaborado para que así sea… que penita! Sin embargo, la isla sigue estando allí y sigue teniendo los mismos atractivos, solo que esta vez te tocará compartirlos con grupos de borrachines que hacen de Koh Rong una segunda Sihanoukville, con sus consecuencias.
Las playas no se han marchado, todavía siguen allí: la principal con la mayoría de alojamientos y restaurantes, y otras secundarias donde aislarte y sentirte como un Robinson Crusoe. Nosotros quisimos escapar un poco del turisteo y nos alojamos en unos bungalows en la playa que hay a continuación de la principal. Era el único alojamiento aquí y estábamos prácticamente solos.
Las aguas siguen siendo claras y cristalinas, donde poder nadar como si estuvieras en una piscina de agua caliente.
Los pasatiempos se siguen limitando a tumbarse a la bartola durante laaaaargos ratos, pasear por la playa (ojo con los bueyes!), de ahí de vuelta al agua… y por la noche si hay suerte, contemplar el plancton luminoso, aunque nosotros solo lo vimos de día y era un poco asquerosete, la verdad. Los atardeceres siguen siendo los mismos, igual de increíbles como entonces. Los colores del cielo desde aquí parecen salidos de una paleta de un pintor. Los echaremos de menos.
Reflexionando podemos llegar a una conclusión: esperábamos que la isla permaneciera tal y como la conocimos y ahora, al ver que no es así, nos llevamos una gran desilusión, es el motivo por el que no queremos volver a Myanmar. Pero, si este viaje a Koh Rong hubiera el primero nos hubiéramos quedado maravillados sin lugar a dudas. Es y será un auténtico paraíso.
Nos reencontramos con nuestro amor a primera vista, sigue estando igual de bello que siempre, aunque nos haya sido infiel en nuestra ausencia…
INFO ÚTIL
- Dónde dormir: nosotros lo hicimos en el Pura Vita Resort, aunque hay opciones más baratas en la playa principal.
- Cómo llegar: los billetes del ferry cuestan 15 $ ida y vuelta si los sacas en el Dive Center. Si lo haces en cualquier agencia u hotel (o incluso en la caseta de información turística) sale más caro.
13 comentarios en “Volviendo a nuestro «País de Nunca Jamás»”
Hola chicos!
Os seguimos con sana envidia, viendo este peasooo de viaje que os estáis pegando (a vosotros os daban dos, ehhh).
Leemos con pena el cambio que está sufriendo la isla de Koh Rong :-(. Cuando estuvimos hace dos años y medio se conservaba bastante virgen aún!
Pasadlo muy bien y seguid mostrándonos el mundo desde vuestra ventana mochilera!
Abrazos!
Chicos!!!!! Que taaaaaaal??? Nos acordamos mucho de vosotros! Ese encuentro en mandalay! jeje. Muchas gracias por escribirnos y seguirnos claro! Ojala podamos vernos en algún punto del mundo (además de en Barcelona, claro!) Un besazo muy fuerte!! Esperamos que todo os vaya genial!
Un verdadero paraíso increíbles las fotos, antojan a cualquiera a ir de visita, saludos
Hola ! Vamos a viajar en febrero y tenemos la idea de ir a Koh Rong para ver el plankton luminoso. Hay algún momento del año especial para verlo? O se puede ver en cualquier época? Gracias !!!!!!
Pufff… pues ni idea! Nosotros fuimos en abril y había un poquito… Un saludo!
Hola otra vez chicos!! Que bien viene curiosear. Otra entrada que se ve con fotos missing! Un abrazote!!
Wola!!! Gracias!!! Ya hemos corregido unas cuantas… no se pq pero se cambia la URL de la imagen… ains!!! Ya sabes, si encuentras alguna otra pega un toque 😉
Pingback: Koh Rong Sanloem - La isla de la felicidad - AMBITIOUS TRACKS
Pingback: Koh Rong Sanloem - Mil excusas para quedarte un día más - AMBITIOUS TRACKS
Sois turismo de masas al igual que los demás, tenéis un blog, os hacéis selfies, no hay nada interesante en vosotros, ¿hay algo más estereotipado que eso? no os lo toméis como algo personal, o si
Gracias por tu comentario. Un saludo
Hola cómo están?? Saben qué tal las lluvias de principios de octubre??
Hola! Pues en principio octubre es un mes bastante lluvioso. Mira. Un saludo!